Este es un chiste que se cuenta cambiando la gravedad de la voz.

Estaba la mujer contando la historia de su vida de una manera trágica (con voz infantil)

Cuando yo tenia cinco años todo el mundo me decía:

Que cara tan linda! Que cuerpo tan lindo! Pero que voz tan fea.

Cuando tuve 12 años todo el mundo me decía:

Que cara tan linda! Que cuerpo tan lindo! Pero que voz tan fea.

Cuando cumplí los 15 años, los amigos me decían:

que cara tan linda! Que cuerpo tan lindo! Pero que voz tan fea.

A mis 18 años, tuve mi primer novio.

El me dijo un día: cariño, suénate la nariz, (y con voz normal) desde ese día mi vida cambio.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *