Chiste Número #198

Esta era una vez un niño que se llama Jesús y su mamá lo mandó a comprar un kilo de azúcar.

El niño le preguntó que dónde era la tienda, y la mamá le respondió:

Donde veas que entra mucha gente ahí es la tienda.

Cuando el niño va por la calle, sonaron las campanas llamando a misa y mucha gente entra a la iglesia, el niño pensando que era la tienda, entra y estando ahí el padre preguntó:

¿A qué vino Jesús a la tierra?

Y el niño respondió:

A comprar un kilo de azúcar.