Esta era una vez dos personas, una que decía verdades y otro que decía mentiras.
El que decía mentiras le cuenta a su amigo que tiene un perro del tamaño de una persona, y éste le responde que él tenía uno del tamaño de un poste de luz.
El que decía verdades le dice:
Vayamos a buscarlos para verlos.
Entonces, el de la mentira del perro del tamaño de una persona y piensa:
Que le voy a enseñar si no tengo al perro, va y toma su tortuga y le dice a su amigo:
Si quieres te traigo al perro, pero aquí está la garrapata.