El médico se dirige a un tipo que estaba en la sala de espera:

«Señor, le tengo una mala noticia: su madre, la que ayer se encontraba internada, ha…»

«No, esa no era mi madre, era mi suegra».

«¡Ah, entonces le tengo una buena noticia!»

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *