Un panadero ambulante promocionaba su pan:
¡Caliente el rico pan! ¡Caliente el rico pan!
A ver, deme un pan, señor. Le dice un hombre al panadero.
El panadero le da un pan.
¿Cómo? ¡Pero si este pan está frío!
¡Claro! Responde el panadero. ¿No oye? ¡»Caliente» el rico pan!