una vez un hombre caminando por la selva abre un matorral de ramas, y detrás de éste había un montón de caníbales, el hombre dice:
¡Ya me fregué!
Cuando de repente se abre el cielo y se oye una voz:
¡No, todavía no, lo que usted tiene que hacer es correr, golpear al jefe, quitarle la lanza y matar a su hijo!
Y se cierra el cielo, el hombre rápidamente corre, golpea al jefe, le quita la lanza, y mata a su hijo.
Se abre el cielo de nuevo y se oye una voz:
¡Ahora sí, ya te fregaste!