Una señora tenía un nieto al que llamaba Diploma. Diploma para acá, Diploma para allá; Diploma ven acá. Un día alguien le preguntó:

Señora, ¿Por qué llama usted Diploma a ese niño?

Ella le contestó:

Porque mandé a mi hija mayor a estudiar a la ciudad y eso fue lo que me trajo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *