Se encuentran dos burros parlanchines. Un burro muy alegre le dice al otro:
¡Hola! ¿Cómo estás? ¿Sabes?, a mí me va súper bien, me contrató un señor de un circo, tengo buen sueldo, tarjetas de crédito, lo último en autos deportivos, soy la estrella principal del circo.
El otro le contesta muy deprimido:
A mí me va mal, me contrató un juguero y paso vendiendo jugos todo el día con dos barriles al hombro, los niños se me suben y me golpean.
Pero vos si que eres bruto, le dice el primer burro, por qué no hablas y así le demuestras que no eres cualquier burro.
¡Estás loco!, le dice el otro, qué quieres, que me ponga a gritar jugooossss, jugooooossss.