Lucas no deja de hacer preguntas, su mamá, ya cansada, le dice:

Lucas, basta, recordá que la curiosidad mató al gato.

El chico se queda pensativo unos segundos y pregunta:

Mamá, ¿y qué es lo que quería saber el gato?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *