Estaban en una obra de teatro, la obra se trataba de los tres Reyes Magos. Uno de los niños que representaba a un rey, le preguntó a la profesora, qué debía hacer si se le olvidaba su parlamento, la profesora le indicó que inventara algo. Bueno, comienza la obra, se acerca el primer rey a la cuna, y le dice:
Niño Jesús, te traigo el incienso.
El segundo rey se acerca y dice:
Niño Jesús, te traigo el oro.
Va el tercero, pero se le olvida lo que tiene que decir, entonces lo inventó y dijo:
¡Ay, pero si este niño es idéntico a su padre!