En un cementerio una señora llora el fallecimiento de su esposo y dice tristemente:

Pobre de mi esposo, era muy bueno y murió como un pajarito.

Un borracho que escuchó lo que decía la triste señora dijo:

Señora, hip, hip, disculpe, por meterme en su conversación, cómo es que su marido murió como un pajarito, dígame usted, ¿quién fue el desgraciado que lo mató de un hondazo?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *