En la tarde del sábado aproximadamente las 2:00 pm, un niño va donde su padre y le dice:
Papi, ¿Puedo ir a la fiesta de cumpleaños del niño rico que se mudó en la esquina?
El padre le dice que sí, pero que esté en casa antes de las 7:00 pm de la noche.
Luego más tarde pasan las 7, las 8, las 9, ya toda la familia está reunida en la casa del niño, y todos preocupados, y a eso de las 11:00 pm el niño llega a la casa con el ojo morado y la cara desbaratada.
El padre preocupado le pregunta:
Mi hijo, ¿Qué te pasó?
Nada papi, que rompieron la piñata y a mí me cayó un televisor y un VHS.