Llama un loco al manicomio municipal, y pregunta al recepcionista:
¿Hay alguien en la habitación 207?
A lo que este recorre los pasillos para chequear la ausencia de inquilinos en esa habitación, y luego de unos minutos, vuelve y le contesta:
No.
El loco responde:
¡Entonces, me escapé!