Este era un manicomio donde todos los locos estaban metidos en la piscina, y el vigilante les mando que salieran de la piscina, pero ellos no querían, estuvo horas y horas pero ninguno de ellos quería salirse, entonces un loco que estaba fuera le dijo al vigilante:
Le apuesto lo que quiera a que los saco de la piscina.
Viendo el vigilante que no le quedaba más remedio le pidió que lo intentara.
Entonces, el loco coge la manguera y les dice a los locos que estaban en la piscina:
¡Si no salen de la piscina los mojo!