Era una vez un señor llamado Pedro que quería una mascota, así que decidió ir a la tienda de mascotas que quedaba a dos cuadras, llegó y le pidió al vendedor una mascota extraña y este le entregó una caja muy grande, y Pedro le pregunta:
¿Qué es eso?
Y el vendedor le dice:
Un ciempiés.
Y Pedro sorprendido le dice:
¿Qué tanto sabe hacer?
Y el vendedor le explica que sabe barrer e ir a la tienda en pocos minutos. El vendedor lo convenció y se lo compró.
Pedro llegó a su casa y abrió la caja y le ordenó limpiar y lo hizo en poco tiempo. Después Pedro se acordó que ya no tenía pan y leche y mandó al ciempiés a la tienda.
Pasaron 5 minutos, 10 minutos, 1 hora, 2 horas, 3 horas y nada…
Y Pedro dijo:
Pues mi ciempiés ya se tardó, voy a ver si ya viene, abre la puerta y vio allí el ciempiés y Pedro le pregunta:
¿Qué haces aquí?
Y el ciempiés le responde:
Poniéndome los zapatos.