Está una niña llorando desconsoladamente, entonces llega un amiguito y le pregunta:
¿Por qué lloras?
La niña responde:
Es que mi mamá va a comprar un nuevo hermanito.
El niño lleno de emoción le dice:
Pero eso qué tiene de malo, deberías estar contenta.
Y la niña le dice:
Es que la semana pasada compraron un coche nuevo.
Y el niño le dice:
¿Y eso qué tiene que ver?
Es que dieron el coche viejo como enganche.