Estaban en una guardería los bebés cuando en eso uno de ellos dice:
Compañeros, ya tengo el secreto de cómo saber si somos niños o niñas, sí, esa duda que nos ha atormentado desde que nacimos ya será resuelta.
Entonces, todos los bebés se reunieron para saber su sexo, todos se acostaron en su cuna y el bebé mayor fue pasando con cada uno personalmente, les levantaba su cobija y decía:
Niño, niña, niña, niño, niña, niño…
¡Ay! ¿Qué? ¿Qué? ¡Es que tú tienes los zapatos blancos!