Era una vez dos Atlantes que traían una camioneta hasta el tope de cosas, y más altas en la caja, y al llegar a la aduana no pasaba pues chocaba arriba, y se pusieron a pensar cómo pasarla y dice uno:
Vale, ¿Y si acostamos la camioneta para pasarla?
Y le contesta su compañero:
¡No! ¿Cómo la vamos a voltear?
¿Y si bajamos las cosas y las pasamos y las volvemos a subir?
Y le contesta:
¡No qué flojera!
Bueno, ¿Y si le bajamos las llantas, y las pasamos y las inflamos de aquel lado?
Y le contesta:
No seas tonto, si topa de arriba, no de abajo.