Estaba una señora bañándose en su casa, cuando de repente le toca la puerta su vecina y le dice: Vecina, a su hijo lo chocó un rodillo. A lo que contesta la señora. ¡Pásalo por debajo de la puerta que me estoy bañando!
Últimos Chistes de Crueles
Había una vez una niña tan fea, pero tan fea, que la mamá la alimentaba a control remoto.
Va un jorobado por la calle y se le cae un paquete de Camel al suelo, un señor lo recoge y le dice: Oiga, que se le ha caído el carné.
Este era un doctor que le dice a su paciente: Señor, le tengo una noticia buena y una mala. El señor le dice: Primero deme la buena doctor. La buena es que nunca más se tendrá que parar en su trabajo, nunca más. ¿Y la mala doctor? La mala es que le cortaremos las 2 […]
Era tan flaca que cuando se tomaba el café muy caliente se le calentaba la ropa.
Durante la cena anual de críquet había demasiado bullicio, y el orador invitado se quejó ante el presidente: ¡Con ese ruido, no alcanzo a oír ni lo que estoy diciendo! No se preocupe, le responde éste en tono tranquilizador, no ha dicho nada interesante.
Era una señora, tan gorda, tan gorda, que cuando se subía a un barco, el barco se volvía submarino. Era un señor, tan loco, pero tan loco, que de tan loco que estaba se volvió loco.
Sólo para enfermos pobres: Se vende, al mayor, lote de medicinas vencidas.
Había una vez un hombre tan, pero tan, pero tan pequeño, que se tiró de un grano de arena en paracaídas.
Había una mujer tan fea, pero tan fea, que no se la come una piraña en ayunas.